[:es]Las consultas en diferido, los encuentros virtuales y el seguimiento online de los tratamientos son algunas de las oportunidades que brinda la telemedicina. La incorporación de la innovación al área de la salud no solo aporta beneficios en el propio centro sanitario sino que, además, ofrece la posibilidad de continuar el tratamiento de forma dirigida una vez que el paciente sale de la consulta.
Dispositivos móviles, wearables, programas de software, apps o incluso las redes sociales son algunas de las tecnologías que ya se están aplicando progresivamente en el sistema sanitario. Una implantación que continuará en los próximos años. De hecho, según un artículo publicado por Expansión, los expertos del sector prevén que en 2020 se presten hasta 158,4 millones de consultas virtuales.
Uno de los perfiles entre los que mayor importancia tendrá el uso de estas herramientas será en los pacientes crónicos. La tecnología les permitirá mejorar su autocuidado y aumentar la adherencia al tratamiento. Pero, además, mejorará el seguimiento por parte del profesional y reducirá los costes hospitalarios.
Según los datos presentados en el X Congreso Nacional de Atención Sanitaria al Paciente Crónico, que se celebró el pasado mes de marzo en Zaragoza, el 56% de los usuarios actuales de aplicaciones móviles de salud son pacientes que sufren enfermedades crónicas. Estas aplicaciones permiten establecer recordatorios y alarmas a través de asistentes virtuales y liberar de trabajo a familiares, cuidadores y personal médico en la toma de datos.
En Lug HT creemos firmemente en las posibilidades que otorgan las nuevas herramientas para mejorar la calidad asistencial al paciente. Por ello, hemos desarrollado la herramienta LUG HD gestiona la dispensación domiciliaria a pacientes de larga duración, evita los desplazamientos que han de realizar mensualmente al hospital para retirar los fármacos que tienen prescritos, mejora la calidad de vida del paciente y reduce las esperas en los centros.[:]